El pueblo cuenta
Año I N° 6
Marzo de 2018
Cerámica Guaraní
SUMARIO
Presentación de los guaraníes
El pueblo guaraní contra los conquistadores
Presentación de los Guaraníes
Texto: Alicia Grela Vázquez
Imagen: Elsa Sposaro
Los guaraníes fueron llamados así por los
conquistadores europeos al interpretar mal su grito de guerra: guará-ny
(combatidlos). Pero ellos se consideraban a sí mismos: avá (humanos).
Fueron considerados por el Primer
Adelantado del Río de la Plata, Don Pedro de Mendoza como carios o caríes
(caribes o caníbales).
Pedro de Mendoza
El cronista de esa expedición fue Ulrico
Schmidl, quien en su obra Viaje al Río de la Plata, los describió bajo el
nombre de carios y caríes del siguiente modo: La tierra de estos carios es de
mucha extensión, casi 300 millas de ancho y largo, son hombres petizos y
gruesos y más capaces de servir a otros. Los varones tienen en el labio un
agujero pequeño en el que meten un cristal amarillo, que en lengua de ellos se
llama parabol, de dos jemes de largo y grueso como el canuto de una pluma.
Ulrico Schmidl – Levinus Hulsius
Esta gente, hombres y mujeres, andan en cueros
vivos, tal como Dios los echó al mundo. Entre estos indios el padre vende a la
hija, el marido a la mujer, si esta no le gusta, también el hermano vende o permuta
a la hermana; una mujer cuesta una camisa, o un cuchillo de cortar pan, o un
anzuelo o cualquier otra baratija por el estilo. Estos carios también comen
carne humana, cuando se ofrece, es decir, cuando pelean y toman algún enemigo,
sea hombre o mujer, y como se ceban los chanchos en Alemania, así ceban ellos a
los prisioneros.
Carios
Pero si la mujer es algo linda y joven, la
conservan por un año o más, y si durante ese tiempo no alcanza a llenarles el
gusto la matan y se la comen, y con ella hacen fiesta solemne, o como si fuese
para una boda; mas si la persona es vieja la hacen trabajar en la labranza
hasta que se muere. Esta gente es la más caminadora de cuantas naciones hay en
el Río de la Plata. Son grandes guerreros por tierra. Sus pueblos o ciudades
están en las alturas del agua Paraboe.
Territorio Guaraní
Estas afirmaciones fueron confirmadas por el
Segundo Adelantado del Río de la Plata, Álvar Núñez Cabeza de Vaca, en sus
Crónicas de Naufragios. También fueron
reiteradas en 1550 por Hans Staden en su libro La verdadera historia de
las gentes caníbales salvajes, desnudas y feroces.
Álvar Núñez Cabeza de Vaca
Hans Staden
Guaraníes
Hans Staden rodeado por Mujeres Guaraníes
En 1960
el antropólogo Alberto M. Salas recibió el Segundo Premio Municipal de Ensayo,
por su
obra Crónica florida del mestizaje de las Indias, siglo XVI ; y en 1984 el
Premio Konex de Platino. En ella el Paraguay es considerado como lo había hecho
en 1530 su gobernador: Martínez de Irala: El paraíso de Mahoma.
Alberto M. Salas
Martínez de Irala y Alberto Salas muestran las
raíces del mestizaje. Sólo varía el tono emotivo de cada uno ante ese hecho. En
su denuncia ante las autoridades españoles, escribe el gobernador:
"...el que tiene ocho (mujeres) es porque
no puede tener dieciséis (...); con tanta desvergüenza y poco temor de Dios que
hay entre nosotros en estar como estamos con las indias amancebadas que no hay
Alcorán de Mahoma que tal desvergüenza permita..."
Martínez de Irala
Los guaraníes, cuando llegaron los primeros
europeos en el siglo XV, fueron sus aliados ante los enemigos locales: los
guaycurúes del Chaco. Pero al poco tiempo la alianza derivó en esclavitud. Los
pobladores del Delta del Paraná fueron reducidos rápidamente, pero en otras
regiones pudieron refugiarse y resistir a la conquista.
Guaycurúes
Pueblos del Chaco
En el siglo XVII los jesuitas instalaron sus
Misiones en Paraguay, Brasil y Argentina. Los religiosos protegieron a los
pobladores que allí encontraron refugio ante la crueldad y la avaricia de los
europeos, pero que a cambio sometieron su cultura, sus creencias y hábitos. En
el contacto con el Viejo Mundo muchos murieron por las armas, los trabajos
forzados y las nuevas enfermedades.
Ruinas de las Misiones Jesuíticas
En el siglo XVIII (en 1767) el rey Carlos III
decidió la expulsión de los jesuitas por considerarlos un peligro para el
Estado Ibérico. Con esto los guaraníes tuvieron escasas opciones: quedar a
merced de la avaricia de los Encomenderos españoles y la explotación de los
Bandeirantes portugueses o huir a la selva y refugiarse en ella.
En el siglo XIX, en la segunda mitad, los
guaraníes sufrieron la presión de los colonizadores europeos y criollos que los
arrinconaron y arrasaron, expulsándolos de sus tierras. Éstas fueron taladas
para ser usadas con otros fines (para la explotación productiva). Esto sirvió
para el asentamiento de una economía de plantación.
Guaraníes
En el siglo XX los guaraníes a duras penas
subsistían, pues escaseaba la caza, debido al desmonte de la selva y a los
cazadores furtivos. Intentaron realizar cultivos, si contaban con tierras para
hacerlo. Y también complementaban su alimentación con la pesca y fieles a su
forma de vida ancestral, recogieron frutos silvestres y miel.
Guaraní pescando
En el siglo XXI las dificultades de los
guaraníes no han disminuido, pero sí su número.
La población continúa descendiendo en cantidad, nivel y calidad de vida, pues va de la
pobreza a la indigencia. El pueblo cuenta que intenta sobrevivir con las
artesanías: las tallas de madera, la alfarería y los tejidos.
Alfarería guaraní
Talla guaraní
Tejidos guaraníes
Algunos guaraníes emigran para trabajar como
asalariados explotados en los obrajes madereros, o en los yerbatales de la
región. Allí la educación de los niños es bilingüe; o bien se instalan en las ciudades integrando
grupos de connacionales que sufren la misma inhumana e ilegal discriminación.
El Pueblo Guaraní .Contra los Conquistadores
Texto: Alicia Grela Vázquez
Imagen: Elsa Sposaro
El antropólogo Bartomeu Meliá, contemporáneamente
estudió la Lengua y la Historia Guaraní. Pese a ser español y jesuita dio cuenta de
las veinticinco rebeliones del
Pueblo Guaraní que se registraron entre 1537 y 1616 contra la invasión
y el dominio hispánico. Esto comenzó tempranamente con los
primeros viajes.
Ulrico Schmidl participó de la expedición de Pedro de
Mendoza, el primer adelantado del Río de la Plata. Escribió sobre lo
que él llamó el Paraíso de las selvas de
Paraguay y el Chaco, después de haber vivido por dos décadas allí. Publicó
la Vera Historia, en 1599 con algunos grabados ilustrativos.
Grabado de Ulrico Schmidl
Según lo
afirmó el eminente etnólogo mallorqués, las dos causas que produjeron esas
consecuencias fueron básicamente sólo dos. La primera de ellas la negación a
trabajar para los españoles. La otra, la pretensión de reafirmar sus tradiciones
religiosas que se veían amenazadas por la cultura foránea.
Bartomeu Meliá
El
levantamiento del cacique Oberá en la región de Guarambaré, en el
año de 1579 fue un caso paradigmático de lo que fueron muchos otros movimientos
de liberación del pueblo Guaraní. El jefe
sabía que no se podía vencer por las armas a los encomenderos. Por eso
estableció otro modo de lucha: la huelga.
Cacique Oberá
Textos
varios lo atestiguan: … entre los indios se ha levantado uno, con un
niño que dice ser Dios o hijo de Dios, y que tornan con esta invención a sus cantares
pasados, a que son inclinados de su naturaleza… entretanto que dura, ni siembran
ni paran en sus casas,… otra cosa no entienden, sino en cantar y bailar,
hasta que mueren de cansancio…y así pierden los tristes la vida y el ánima.
Cacique Oberá
El conquistador Domingo Martínez, aspirante a clérigo,
en su carta fechada el 2 de julio de mismo 1556, probablemente se refiriese al
mismo movimiento al decir:… Son tan
crédulos entre ellos que, con haber tanto tiempo que algunos de ellos son
bautizados y vienen aquí cada día de fiesta, si el más malaventurado entre
ellos dice que es Dios, o que no es
bautizado, si él no los bautiza, luego la tierra se despuebla toda para ir a él
a tornarse a bautizar o a oír su palabra como Dios…
El clérigo Martín González, atribuyó el levantamiento indígena a
que el obispo De la Torre echó a
los indios de la doctrina. Pero tanto en su carta como en la de Domingo
Martínez, el levantamiento surgió en el contexto de una opresión
que los indios consideran intolerable y a la que intentan responder con resistencia
pasiva al trabajo, o con la huida al monte, en busca de su libertad
y sus tradiciones.
El encomendero Martínez se desesperaba al no conseguir que las indias
trabajasen tanto y como él quería. Despechado aduce que la gloria de las
indias es echar a perder a los cristianos,
y destruir cuanto hay, sin más cuenta y razón, de que si les preguntan por ello, y dicen ellas erua que es como quien dice no sé, y sacarlas de
allí, aunque lo sepan, después que dicen no, aunque las desuellen.
Mujer guaraní
Seguramente los
movimientos libertarios se dieron en el mundo Guaraní aún antes de la confrontación con el mundo de
la conquista. El profetismo de los chamanes es una manifestación
de ello. La intensidad contestataria
se incrementó cuando los trabajos
impuestos por el régimen colonial se hicieron más continuados e intolerables.
Chamán guaraní
La encomienda
era un sistema que pretendía someter a los individuos y a las comunidades con sus caciques y
familias. La teoría y la práctica encomendataria se basaban en el dominio
político y religioso (cristianismo) para lograr una mayor y más eficiente explotación
económica, que incluía la expropiación, el
servilismo y la esclavitud.
El Encomendero Francisco Hernández Girón
El antiguo Paraguay habitado por los Guaraníes
fue la tierra de mesías y profetas indígenas durante dos siglos. En
esa región se centró un cúmulo de movimientos de liberación mística, que se incrementó
cuando los conquistadores y los jesuitas establecieron su dominio,
que amenazó con destruir la cultura local preexistente.
Ruinas de la Misión Jesuítica de San Ignacio
La desesperación
que se apoderó de los Tupinambá y de los Guaraníes. Esto habría
animado al pueblo a escuchar a quienes
se levantaban entre ellos ofreciéndole como solución la huida hacia la
mítica Tierra sin Mal, carente de
sufrimiento, o bien el próximo advenimiento de una Edad de Oro.
Tupinambá
Estava na beira do rio (Tupinambá)
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